Almensilla: Entre Olivos y Tradiciones en la Provincia de Sevilla
El origen de Almensilla. En el corazón de la provincia de Sevilla, entre la ondulante topografía y los olivares que pintan el paisaje, se encuentra Almensilla. Este pueblo es un tesoro escondido que espera ser descubierto. En mi exploración de los encantadores pueblos sevillanos, no puedo pasar por alto la riqueza cultural y la historia que se despliegan en este rincón singular.

La historia y el origen de Almensilla
El origen de Almensilla y su historia tiene sus raíces en la cultura árabe, siendo inicialmente una alquería. Esto era un pequeño conjunto de casas propiedad de Serra-al-Mensi, un árabe que se estableció en la zona. La abundancia de agua subterránea hizo que los árabes consideraran este lugar ideal para establecerse, garantizando el riego de sus cultivos y el suministro de agua.
Aunque algunos historiadores vinculan el nombre de la localidad al árabe dueño de la alquería, su origen es motivo de controversia. Algunos sostienen que proviene de la palabra Mensilla, que significa ‘Pequeña meseta’ en latín. Después de la reconquista cristiana, los árabes le añadieron el artículo Al, fusionando ambas palabras en ‘Almensilla’.
En el siglo XVII, Almensilla, junto con otros pueblos de la región, formó parte de las posesiones del poderoso Conde-Duque de Olivares, valido del rey Felipe IV.
Durante la Edad Media, Almensilla fue una aldea dependiente de Palomares del Río, independizándose y constituyendo su propio ayuntamiento en 1837.
En la actualidad, la población de Almensilla ha experimentado un notable crecimiento debido a la expansión urbanística de finales del siglo XX y principios del XXI, atrayendo a residentes de la capital en busca de viviendas asequibles en el entorno del Aljarafe.